Reseña de Damas de honor de Jane Costello

Cuatro bodas. Tres ex novios contrariados. Dos prótesis mamarias de silicona. Y un hombre guapísimo… Cuando falta menos de una hora para que su mejor amiga vaya camino del altar, Evie trata de llevar a cabo la tarea más importante que tiene como dama de honor: dejar a su amiga en el punto de partida. Aunque las circunstancias no parecen jugar a su favor, al menos su confianza se ve reforzada por sus nuevas prótesis de silicona. Sólo hasta que el deslumbrantemente apuesto Jack las descubre asomando por su vestido. Evie es una periodista vivaz de veintisiete años que tiene los pies en la tierra, que nunca se ha enamorado y que empieza a creer que nunca lo hará. No es de extrañar que, ante la perspectiva de ser dama de honor en un buen número de inminentes bodas, se sienta completamente atemorizada. Sin embargo, cuando Jack comienza a ser una constante en las ceremonias, las cosas sin duda empiezan a ir mejor. Solo que, al descubrir que él sale con la despampanante y egocéntrica Valentina y tener un desafortunado incidente con un vibrador de veinticinco centímetros, no todo sale como Evie había esperado…

Con sólo veintisiete años Evie Hart tiene montones de ex-novios con los que se cruza en todas partes. Cuatro bodas en las que ejercer de dama de honor y un jefe que la relega a entrevistar animales.

Con tantas relaciones rotas parece que Evie tenga un serio problema con el compromiso. Nada más lejos de la realidad con quien tiene un problema es con el amor. Jamás se ha enamorado, pero eso está a punto de cambiar.

Lo malo es que el chico en cuestión sale con una de sus amigas y la ha pillado en la situación más comprometida de toda su vida.

 Lo primero que tengo que decir a favor de esta novela es lo mucho que me he reído, desde luego Evie  Hart en algunos momentos es un auténtico desastre... la novela destila el famoso humor británico (que por cierto nunca creí que existiera) La pobre no sólo es un poco patosilla sino que además tiene mala suerte, mira que tenemos cosas en el bolso...

"El mero hecho de ser británicos hace que atribuyamos a una simple taza de té una serie de propiedades curativas que ni siquiera exigirías a un psiquiatra de la calle Harley"

Incapaz de decidirme por uno os dejo los dos. Me encanta el modo en el que Costello ironiza sobre un punto tan dramático. Consiguiendo que se nos escape una sonrisa.

"Por lo visto había salido a comprar un poco de LSD, cosa que ya indica todo lo que necesitas saber sobre él. Hay gente que sale a comprar leche y no vuelve. Mi padre ni siquiera fue capaz de escapar de forma respetable"

A pesar de los momentos divertidos en Damas de honor también encontramos momentos serios, momentos dramáticos, momentazos románticos...
Damas de honor se desarrolla de boda en boda, pero no sublima el matrimonio ni mucho menos, ya que no siempre una boda es la mejor guinda para el pastel, por lo que nos mostrará todas sus variantes, habrá matrimonios felices, otros que no lo son tanto y algunos que intentarán recuperar lo que tenían antes de dar el sí quiero.

Otro punto a su favor es que los capítulos son realmente cortos por lo que la lectura se vuelve ágil y amena.

La autora intenta implicar al lector en la lectura, de ahí que haga constantes alusiones a personajes y series de TV que la sociedad británica conoce a la perfección. Incluso para delimitar el tiempo histórico utiliza este recurso:

"La última vez que había hecho eso con el nombre de un chico Duran Duran estaba en las listas de éxitos"

Otro gran acierto son sin duda los personajes, hay secundarios tan interesantes como la propia protagonista: Valentina, Bob, Sarah (madre de Evie)

Algunos caracterizados por sus excentricidades, otros por sus defectos, pero todos ellos con una personalidad bien definida y muy marcada. Y no hay que olvidar a Jack que es casi perfecto, guapo, culto, altruista y sobre todo FIEL... y para rematarlo no se inmuta por nada de lo que hace Evie (y eso tiene mucho mérito) aunque más mérito tiene encontrar a su madre de lo más normal.

El único punto malo de la novela es que lo que hace Beth quede tan en el aire, es evidente que lo hace para fastidiar, pero eso no queda reflejado en Damas de honor. Queda todo como un malentendido, cuando es evidente que ha actuado con premeditación y alevosía. Las frases que utiliza sólo tienen una finalidad, malmeter y por si quedaba alguna duda va y se chiva de lo que ve.

A pesar de este punto, la novela es sumamente divertida y de lectura ágil, mi nota para ella es:

Es una novela muy cinematográfica, del estilo de 27Vestidos os El diario de Bridget Jones, así que no me extrañaría que algún productor decidierra llevarla al cine, yo por si acaso estaré atenta a la cartelera.