Anna vestida de sangre, Kendare Blake

Cas Lowood ha heredado una inusual vocación: él mata a los muertos.

Como su padre lo hizo antes que él, hasta que fue brutalmente asesinado por un fantasma al que había ido a ejecutar. Ahora, armado con el misterioso y mortal Athame de su padre, Cas viaja por el país con su madre, una bruja blanca, y su gato rastreador de fantasmas. Juntos persiguen leyendas y folklores locales, tratando de seguir a los muertos asesinos - dejando atrás cosas mundanas como el futuro y los amigos.

Cuando llegan a un nuevo pueblo en busca de un fantasma que los locales llaman "Anna Vestida en Sangre (Anna Dressed in Blood)", Cas no espera nada fuera de lo normal: rastrear, cazar, matar. Lo que él encuentra es una chica llena de maldiciones y furia, un fantasma como nunca antes había visto. Ella aun usa el vestido que tenia puesto el día de su brutal asesinato en 1958; una vez blanco, ahora manchado de rojo y goteando sangre. Desde su muerte, Anna ha matado a todo aquel que se ha atrevido a entrar en la desierta casa Victoriana que ella solía llamar hogar.

Pero ella, por alguna razón, perdona la vida de Cas.

Cas es un cazador de fantasmas, pasa su vida junto a su madre y su gato a la caza y captura de fantasmas asesinos. Ya tiene planeado su próximo destino Thunder Bay, la ciudad en la que fue asesinada Anna  Korlov. Armado con su áthame (el cuchillo de su padre capaz de matar acabar con los muertos) se planta en la ciudad y comienza la búsqueda de la casa de Anna, para ello recurrirá a la chica más popular y a sus amigos deportistas pero las cosas se complicaran y se encontrara con algo que no se esperaba, que Anna le perdone la vida.

Anna vestida de sangre es principalmente, lo digo desde ya, una novela que engancha desde la primera página. 

Ya desde la primera línea nos encontramos de frente con el trabajo de Cas y a partir de ese instante y a pesar de cierto temor (soy muy cagueta, lo sé) no pude dejar de leer, de hecho me la leí en una sola noche. Es una novela que sorprende y que en ciertos momentos resulta como poco escalofriante, la autora no evita ciertas descripciones digamos poco convencionales en una novela juvenil, pero sobre todo maneja el suspense y el miedo como nadie. Hasta el gato de la familia resulta fascinante.

La historia está narrada en primera persona por Cas, por lo que sabemos no solo lo que está viviendo en ese momento sino lo que ha vivido desde que tomó el áthame de su padre y se lanzó a la aventura de matar fantasmas. Pero Anna resulta mucho más interesante que cualquiera de ellos.

"Sabe que está muerta. Un dato interesante. La mayoría no es consciente de ello. Muchos están simplemente enfadados y asustados, y son más la huella de una emoción -de un momento horrible- que un verdadero ser. Con algunos puedes hablar, aunque normalmente piensan que eres otra persona, alguien de su pasado. Su discernimiento me confunde; trato de ganar algo de tiempo hablando"

La historia me ha encandilado y algunas escenas son simplemente sublimes. La única debilidad que le encuentro a la historia es el personaje de Anna o la forma en que la autora la redime de cada uno de sus 27 crímenes. Por un motivo o por otro la cosa es que Anna ha matado y de formas horribles. 

Los demás personajes me han gustado bastante, Blake toma personajes estereotipados como la chica más popular del colegio y los desmonta.  Carmel y Thomas son unos secundarios de lujo en una historia que dudo que deje a nadie indiferente. Y eso que todavía no os he dicho del final. Un desenlace inesperado que nos dejará con muchísimas ganas de seguir leyendo y es que es en ese último momento cuando Anna comienza a redimirse ante nuestros ojos y comenzamos a pensar que quizás después de todo su actitud diabólica sí que estaba justificada por lo que le habían hecho.

Resumiendo os lo recomiendo, por supuesto. Eso sí, ¿me aceptáis un consejo? Leedlo bajo la luz del sol, dejad las noches para dormir ;)