Cincuenta sombras liberadas, E.L. James

Cuando la inexperta estudiante Anastasia Steele conoció al joven, seductor y exitoso empresario Christian Grey, nació entre ellos una sensual relación que cambió sus vidas para siempre. Sin embargo, desconcertada y llevada al límite por las peculiares prácticas eróticas de Christian, la joven lucha por conseguir un mayor compromiso por parte de Grey. Y Christian accede con tal de no perderla

Ahora, Ana y Christian lo tienen todo: amor, pasión, intimidad, bienestar y un mundo de infinitas posibilidades. Pero cuando parece que la fuerza de su relación puede superar cualquier obstáculo, la fatalidad, el rencor y el destino se conjuran para hacer realidad los peores miedos de Ana.

Ana y Christian por fin están juntos y felices, ya no hay nada que se interponga entre ellos más que las sombras de este último, entre ellas un peligro que se cierne sobre sus vidas. La felicidad completa es la meta, ¿lograrán por fin alcanzarla? ¿desaparecerán las sombras de Grey?

Esta tercera parte de la trilogía es el perfecto colofón a la historia, pero será el final también. Yo me aventuro a decir que no... Tal y como os comenté en la reseña anterior, al final de este libro hay un capítulo desde el punto de vista de Christian, un capítulo que a mi me ha dejado con ganas de más. Y ya puestos a aventurar, ¿no comenzó Cincuenta sombras de Grey como un fanfic de Crepúsculo? A ver si al final la autora nos regala un Sol de medianoche de Christian, ojalá. Yo me he quedado con ganas de leer más.

Pero vamos a lo que toca, lo primero que quiero comentar es la evolución es de los personajes, Ana cada vez me cae mejor y Christian... pues eso. 

"-Ponte mi camisa para cortarme el pelo. Así como estás ahora me distraes y no conseguiríamos llegar a la cama hoy.

No puedo evitar sonreír. Como sé que está observando todos mis movimientos, voy pavoneándome hasta donde dejamos mis zapatos y su camisa. Me agacho despacio, cojo la camisa, la huelo (mmm...) y después me la pongo. Christian me mira con los ojos muy abiertos. Se ha vuelto a abrochar la bragueta y me está contemplando atentamente."

En esta tercera parte además de los mismos ingredientes que disfrutamos en las dos entregas anteriores, aparece también la acción, el elemento del peligro. Se han producido una serie de atentados contra los Grey y cuando parece que todo ha terminado, regresa la tensión mucho más fuerte. 

La autora ha sabido intercalar ese aspecto en la historia de manera que queda bien cohesionado con la trama.

Del mismo modo, los secundarios también van cobrando más protagonismo y se van cerrando sus propias historias. 

Pero a pesar de todo, la novela sigue girando alrededor de Ana y Christian, y en sus encuentros. Como dije anteriormente, la imaginación del señor Grey sigue siendo fascinante.

Resumiendo, esta última novela me ha gustado tanto como las anteriores, aunque personalmente me quedo con la segunda, es la que más me ha gustado.

La trilogía me ha enganchado completamente, y si hay un cuarto libro seguro que me hago con él.