Sin culpa, Gail Carriger

Abandonar la casa de su marido y volver a vivir con su horrible familia... ¡Lady Maccon es el escándalo de la temporada en Londres!

La Reina Victoria la ha echado del Consejo en la Sombra y la única persona que podría ofrecerle algún tipo de explicación, Lord Akeldama, desaparece de la ciudad inesperadamente. Para colmo, Alexia es atacada por una serie de bichos mecánicos homicidas, lo que indica claramente, como solo unos bichos semejantes pueden hacerlo, que los vampiros de Londres están muy interesados en ver a Alexia muerta.

Mientras lord Maccon elige permanecer en un estado cada vez más ebrio y el profesor Lyall intenta por todos los medios mantener la manada de Woolsey unida, Alexia huye de Inglaterra para buscar refugio en Italia, en busca de los Templarios. Ellos son los únicos que saben lo suficiente sobre los preternaturales para explicar su cada vez más incómoda condición, pero los Templarios pueden ser todavía peor que los vampiros... ¡y además van armados con salsa pesto!

Lady Maccon, antes señorita Tarabotti está tal y como la dejamos en la novela anterior en estado de buena esperanza, una situación que le ha ocasionado diversos problemas... Pero Alexia no es de las que se quedan en casa lamentándose por su suerte, decidida a encontrar respuestas a su inconveniente prenatal, viajará al país de su padre en busca de los Templarios, al parecer los únicos qué tienen las respuestas.

Sin culpa es la tercera parte de la saga El protectorado de la sombrilla, nombre que recibe por la costumbre de la protagonista de llevar una siempre consigo, no ya para protegerse del sol sino como arma de destrucción masiva.

Siguiendo el estilo de las dos entregas anteriores, Sin culpa entremezcla en sus páginas geniales dosis de humor, ironía y elementos paranormales. Es imposible no caer rendido ante el carácter de Lady Macon.
Lord Maccon por su parte nos mostrará una faceta desconocida hasta el momento, el profesor Lyall, lord Akeldama... nos reencontraremos con personajes ya conocidos y descubriremos otros nuevos.

La ironía de la que he hablado y el universo steampunk patente en toda la saga, se ve claramente en el ataque de mariquitas mecánicas asesinas.

"-¿Sí, mi señor?

-Si...-el conde tragó saliva nerviosamente-... si estuviera equivocado, y no digo que lo esté, pero si lo estuviera, tendré que humillarme de nuevo, ¿verdad?"

También llama la atención que la autora trate temas tan tabú en la literatura como la homosexualidad, vale que nos hemos encontrado con homosexuales masculinos, pero son tratados como estereotipos cómicos. La autora va un paso más y nos muestra a un personaje femenino homosexual con una naturalidad realmente necesaria.

Sin culpa y la saga en sí, es una de esas historias originales que vale la pena disfrutar. Desde sus protagonistas pasando por el ambiente tan heterogéneo que Carriger ha creado, en el que lo moderno y lo viejo se dan la mano en armonía, hasta el estilo tan personal de la autora... Sin duda os la recomiendo
Yo me quedo con ganas de leer el siguiente, esperemos que no tarde mucho.