Un beso en París, Stephanie Perkins

La torre Eiffel, Amélie y un montón de reyes que se llaman Luis. Esto es todo lo que Anna conoce de Francia. Por eso, cuando sus padres le anuncian que pasará un año en un internado de París, la idea no acaba de convencerla. Pero, en la Ciudad del Amor, conoce al chico ideal: Étienne St. Clair. Es listo, encantador y muy guapo. El único problema es que también tiene novia. ¿Conseguirá Anna el ansiado beso de su príncipe azul?

Étennie

El humor y la tensión que se respiran página a página en el debut literario de Stephanie Perkins te atraparán y te llegarán al corazón.

 La vida de Anna da un giro de 180% cuando su padre la matricula en un instituto americano en París. De repente se encuentra sola en una ciudad en la que no sabe ni pedir el desayuno. La suerte hará que conozca a Meredith y que esta le presente a sus amigos Josh, Rashmi y Étienne St. Clair. Un chico guapo y encantador que además, tiene novia.

Su amistad irá creciendo al ritmo en que lo hace ella misma como persona y algo más que no se puede permitir.

Decir que le tenía ganas a esta novela es quedarse corto, estaba ansiosa por leerla, lo que normalmente puede resultar un desastre si la novela no cumple las expectativas del lector. Nada que ver. ¡Me ha en-can-ta-do! Y lo separo para darle más énfasis (por si he sido demasiado sutil)

Con Un beso en París me he emocionado, me he mordido las uñas y he estado a punto de zarandear un poco a los personajes y además de eso, me he reído bastante.

Una de las cosas que más gracias me han hecho es que el padre de Anna, sea un escritor de dramones que vende como churros y cuyas novelas se han llevado al cine. Perdonadme pero, a mí me recuerda muuuuucho a Nicholas Sparks. No sé si la autora lo pretendía o no, pero vamos que me ha encantado la semejanza.

Y es que los libros están presentes en toda la novela, la clase de literatura, las constantes alusiones a libros.... Puntos que han conseguido hacer la lectura más interesante (si cabe)

"La sala está completamente oscura. La única luz procede del blanco, el negro y el gris de la pantalla. Clarck Gable finge que duerme y pone una mano en el centro de un asiento vacío de autobús. Tras un momento de irritación, Claudet Colbert se la aparta con cautela y se sienta. Gable sonríe para sí mismo y St. Clair se ríe."

Muchos de los que seguís mis reseñas estaréis alucinados porque justo ayer colgué en Facebook la fotografía del libro que me acaba de llegar. Sí, es cierto. Palabra. Lo comencé ayer poco antes de cenar y lo he terminado esta madrugada sobre las tres y media. No he podido irme a dormir hasta llegar a la última página. Y lo que más mérito tiene es que se trata de una historia sencilla, sin grandes tramas, pero con grandes personajes.

Tanto Anna como Étienne son geniales. Los dos evolucionarán a lo largo del libro, su amistad les ayudará a madurar. Anna conseguirá ser más independiente y valiente y Étienne aprenderá que en la vida siempre hay que tomar decisiones.
En general, todos los personajes son estupendos. Los secundarios están a la altura de los principales, porque de algún modo se trata de una novela de personajes. Lo que sucede viene dado por los personajes.
La novela está contada por Anna, quizás por eso es a la que más llegas a comprender, a pesar de sus errores, es la más coherente del grupo. Étienne es el que más descoloca y a pesar de ello, me declaro fan de su acento británico y de su pelo :D
Resumiendo, Un beso en París es una novela fabulosa que recomiendo a todo aquel que tenga ganas de sentarse en el sofá y leer un buen libro de un tirón.