Reseña de Sombra Nocturna (Nightshade) Andrea Cremer

Cala Tor siempre ha sabido cuál era su destino: tras graduarse en el Instituto Mountain, será la compañera de Ren Laroche, el sexy lobo alfa a cuyo lado luchará y dirigirá su manada, además de proteger los emplazamientos sagrados de los Guardas. Pero cuando infringe las leyes de sus amos al salvar a un guapo chico humano que salió de excursión, Cala empieza a cuestionarse su destino, su existencia y la esencia del mundo que conoce. Si se atiene a los mandatos de su corazón, puede perderlo todo… incluida su propia vida. El amor prohibido, ¿merece el máximo sacrificio?

Hay veces que todo lo que tiene un libro es una portada atractiva y una sinopsis interesante, Sombra Nocturna adorna con estos dos  puntos una fantástica novela que engancha de principio a fin.

Sombra Nocturna nos transporta a un mundo donde la magia, el amor, el deber y la amistad son las notas dominantes.
Cala es la hembra alfa de la manada de los Nightshade,  y está prometida desde que nació a Ren, el macho alfa de la otra manada, los Bane. Cuando se produzca la unión, ellos y sus subordinados formarán una nueva manada llamada Haldis.

Cala, Ren y los demás forman parte de los vigilantes, personas que se convierten en lobos, pero a pesar de todo su poder físico, no son más que esclavos de los guardianes, ellos son sus dueños, y como tales pueden hacer cualquier cosa con ellos, y cuando digo cualquier cosa, me refiero a cualquier cosa... Los guardianes son tan poderosos porque hacen uso de la magia y cuentan con la protección de los espectros.
En Vail, el pueblo en el que viven, la sociedad no está dividida en clases sociales, sino en razas, por un lado los guardianes, por otro los vigilantes y finalmente los humanos. Pero los guardianes tienen enemigos que también poseen magia, los buscadores y los vigilantes son los encargados de protegerlos de ellos.
Los vigilantes aceptan las leyes de los guardianes, unas leyes que sino se cumplen son castigadas con la muerte. Cala acepta esas leyes como dogma,sabe que tiene que unirse a Ren, todo está bien, pero entonces Shay se cruza en su camino y Cala infringe la ley para salvar su vida.
Desde ese momento empezará a plantearse qué hay de cierto en lo que los guardianes les han contado a los vigilantes... además se verá envuelta en un triángulo amoroso, en el que ella es la presa.
Pero ¿Qué pasa cuando una hembra alfa, que nunca ha permitido que un hombre la toque (debe mantenerse pura), un macho alfa tremendamente atractivo y un chico humano se juntan? que saltan a chispas incendiarias por todas partes.

"Cuando Ren me tocaba era como sumirse en un torbellino de sensaciones que me hacían perder el control. Las suaves caricias de Shay eran diferentes y de algún modo más adictivas. El roce de sus dedos en mis labios parecía encender una llama que ardía lentamente, aumentaba de intensidad y me invadía las mejillas, el cuello y cada centímetro de piel con un fuego tan intenso que creí que jamás se apagaría"

Y contra todo pronóstico, yo me quedo con Ren. Ren es el chico malote, sexy y mujeriego, parece que ha aceptado casarse con Cala como una obligación, pero en cada uno de sus gesto hacia ella,  vamos descubriendo más sobre él, adivinando lo que siente...  Algo muy profundo por ella.
Ren es valiente , leal, sabe lo que quiere y lucha por ello, pero de frente, sin golpes bajos.
Shay parece que no termina de aclararse, sorprendentemente me recuerda más a Jacob Black que el propio lobo. Shay va a su marcha y hace caso omiso de los que Cala le pide, parece como si quisiera a Cala sólo porque no la puede tener. Luego parece que no es tan mal chico y después vuelve a cambiar. Es un personaje que no termina de gustarme.
Y luego está Cala y sus hormonas, como la pobre lleva diecisiete años alejada de los chicos, ahora anda un poco loquita con semejantes especímenes detrás de ella. Se pone celosa de Sabine cuando se acerca a Ren pero cuando la besa se acuerda de Shay... raro raro.
Luego están los otros integrantes de la manada, Bryn, Ansel, Mason, Neville que me encantan y luego Sabine, Cosette, Dax y Fey que no me gustan tanto.
Además presiento que Sabine aún tiene que dar mucha guerra.
Pues todo esto y mucho más es Sombra Nocturna, adictiva hasta la extenuación (imposible dejar de leer), sensual y con un final de infarto, y con estos suculentos  ingredientes, se ha ganado las cinco lunitas y mi más sincera fidelidad a esta saga, cuyo segundo libro se llamará Wolfsbane, haciendo referencia a la manada de Ren.